Y justo cuando creía que te había olvidado, vuelve esa sensación, esa sensación que odio pero que a la vez me encanta... Es que es imposible no pensar en ti, que te miento si digo que no te quiero, miento a los que me rodean diciendo que ya no me importas y que me da igual todo lo que hagas con él. Pero... en el fondo yo sé que eso no es así, es que te quiero y no he podido olvidarte y aunque diga lo contrario sabes que me importas, mucho, más de lo que crees. Encima... ¿Sabes qué es lo peor? Que no creo que algún día dejes de importarme.
Me pongo a recordar, a ver fotos del tuenti y me acuerdo de aquel día en la plaza de Melide, el último abrazo, el último beso, el último te quiero, la última caricia, esa última mirada que dejo claro que ya no era lo mismo. Recuerdo desde el primer día que nos besamos, que estábamos los dos avergonzados y no sabíamos que hacer y, el día que lo hicimos por última vez. Lo echo de menos, es inevitable, quiero volverte a ver tan cerca, volver a tenerte a mi lado, escuchar un te quiero de tu boca...
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